¿CÓMO COMUNICARSE CON LOS HIJOS/AS ADOLESCENTES?
La negociación
Negociar consiste en llegar a acuerdos justos o resolver disputas que pueden surgir en la convivencia diaria entre tu hijo/a y tú.
La negociación es un proceso de comunicación, entre dos o más personas, cuyo objetivo es resolver una disputa particular entre ellas. En el ámbito familiar, las disputas giran casi siempre en torno a una queja o una petición de cambio de una persona (padre y/o madre) en relación a la conducta del otro (hijo). Algunas de estas quejas son (según afirman los padres):
- Miente respecto a los deberes del colegio
- Deja la ropa sucia y las toallas tiradas por el suelo
- Vuelve tarde a casa
- Tiene una actitud agresiva y de discusión con nosotros
- Tiene unos amigos que no convienen
- Pasa mucho tiempo viendo la televisión
- Falta a clase
- Se pelea con sus hermanos
- Dice palabrotas
- No ayuda en casa
- No recoge las cosas ni su cuarto
- Siempre quiere estar solo
- Fuma
- Viste de forma poco acorde
El mantenimiento a largo plazo de las disputas cotidianas entre padres e hijos, pueden deteriorar seriamente las relaciones paterno-filiales. Por eso es importante que aprendáis a negociar con vuestros hijos, todas estas cuestiones, con el fin de alcanzar y mantener un clima familiar más positivo.
Negociar supone aprender a dialogar con los hijos y para ello hay que aprender a entenderlos más que defenderse de ellos. Negociar implica generar y fomentar en vosotros y en vuestros hijos una actitud de “ganar-ganar” en lugar de “ganar-perder”.
PASOS CONDUCTUALES
Para negociar tengo que:
- Decidir si mi hijo y yo tenemos diferencia de opiniones (desacuerdo).
- Elegir el momento apropiado: Tengo que controlar mi enfado antes de actuar.
- Comenzar haciendo un comentario positivo a mi hijo.
- Comunicar a mi hijo lo que pienso y/o siento respecto al problema, de manera clara y directa, evitando términos como «tú eres un/a…», «tú siempre…» o «tú nunca…».
- Escuchar atentamente el punto de vista de mi hijo.
- Intentar buscar, si es posible, una solución satisfactoria para todos. Para ello:
- Pedir a mi hijo que cambie su postura respecto a una cuestión determinada y a cambio…
- Ceder en mi postura, proporcionando a mi hijo algo que le resulte positivo.
- Agradecer a mi hijo el haberme escuchado.
BENEFICIOS DE LA NEGOCIACIÓN
1. Mejora los vínculos afectivos: La adolescencia es una época difícil, donde los chicos/as comienzan a cuestionar las normas de forma sistemática, lo que suele provocar un conflicto continuo que debilita las relaciones afectivas.
2. Mejora la empatía: negociando se ponen en práctica habilidades de escucha activa, y uno intenta ponerse en el lugar del otro para llegar al acuerdo.
3. Fomenta la autonomía de nuestros hijos: Si ven que valoramos su opinión y criterio, que les escuchamos… les enseñamos a tomar decisiones y a ser responsables de ellas, teniendo que pensar la forma más correcta de actuar, desarrollando finalmente una autoimagen más positiva.
4. Fomenta las habilidades en solución de problemas: Lo que podrán poner en práctica también con sus amigos y compañeros, teniendo relaciones sociales más sanas.
5. Aprenden una comunicación adecuada: Les proporcionamos recursos para comunicarse de una manera adecuada con su entorno, lo que les ayudará en sus relaciones con sus iguales, profesores…
6. Fomenta la autoestima de nuestros hijos/as: Puesto que no utilizamos reproches y hacemos que se sientas escuchados y valorados. Les hacemos ver que su opinión para nosotros es importante.
Finalmente te proponemos un ejemplo de una negociación adecuada entre padres e hijos
ÁREA DE PSICOLOGÍA DE LA CLÍNICA UNIVERSITARIA DE LA URJC
PETICIÓN DE CITA PREVIA
TELÉFONO: 91 488 9005
CORREO ELECTRÓNICO: psicologia@clinica.urjc.es
HORARIO
De lunes a viernes de 9h a 20.00h
DURACIÓN DE LAS SESIONES
Terapia individual: 1 hora
Terapia de pareja: 1 h y media